La hegemona relativamente incontestada durante las primeras dcadas del ejercicio profesional de la arqueologa en Venezuela, esquematiz a los restos de grupos humanos de economa predominantemente cazadora-recolectora como precermicos y en su estadio tecnolgicamente "ms primitivo", el de cazadores especializados de industria ltica, los ubic en la poca paleo-india, dependiendo en su concepcin de una versin simplificada para las Amricas del paleoltico del Viejo Mundo (o al menos de su parte media a terminal, puesto que los americanos no podan permitirse el carcter aejo de los ltimos paleontropos y los primeros neoantrpos, que para los 1950, eran precisamente ms europeos que asiticos o africanos). El esquema caracterizaba a los primeros americanos como veloces pobladores dedicados a la caza especializada de grandes animales pleistocnicos, a los que habran seguido en sus migraciones estacionales desde el noreste de Asia durante la ltima gran glaciacin, hace 15.000 aos. Fue as como los artefactos lticos, preferiblemente como puntas de proyectil asociados a restos de megafauna, se convirtieron en el indicador arqueolgico de los paleo-indios.
El esquema tipolgico era evolucionista mecnico y unilineal en fusin con el difusionismo caracterstico de la escuela normativa hegemnica en la arqueologa profesional de los Estados Unidos, dando primaca temporal y cultural a los paleo-indios norteamericanos, de cuyas puntas tipo Clovis podan derivarse todos los complejos tecnolgicos hallados al sur del Ro Grande, legitimando una situacin de dependencia incluso desde la prehistoria. Sin embargo, seran los continuadores de esta tradicin terica en Latinoamrica, y con notoriedad en Venezuela, quienes ofreceran los primeros intentos de contestar al paradigma Clovis, con evidencias de poblamiento ms temprano y de tradiciones tecnolgicas posiblemente independientes. En Venezuela, al esta-blecimiento de tipologas de artefactos lticos, resultante en la serie Joboide, sigui la bsqueda de asociaciones con megafauna que podan ser fechadas absolutamente. La sorpresa vino de la ltima comida herbal contenida en el estmago de un joven mastodonte en cuya cavidad plvica se hall un fragmento de punta Joboide: la caza de grandes herbvoros en Taima-Taima arroj la edad de 14.000 aos, bastante anterior a los 11.500 aos de Clovis, que admita las puntas cola de pescado sudamericanas de 9.000 aos. Con mucha resistencia del Establishment, era acumulada la evidencia parcial de un poblamiento interglaciar, o al menos anterior al pleistoceno tardo del modelo Clovis. Eran dudosos los 16.000 aos de Muaco. Pero los yacimientos paleoindios venezolanos, incluyendo Cucuruch en Falcn y Manzanillo en Zulia, no seran los ms antiguos: Pedra Furada, en Brasil, arrojara unos bastante desconfiados 40.000 aos de antigedad. Cruxent y Rouse propusieron una secuencia evolutiva para la serie Joboide que se iniciaba con un "estadio pre-puntas de proyectil", al menos de pre-puntas lticas, puesto que suponan la existencia de una suerte de "manufactura osteodontoquertica" para las ausentes puntas del Complejo Camare, cuya piedra presentaba choppers. En Las Lagunas se incluan puntas lanceloadas. En el Complejo El Jobo aparecan las puntas foliceas y lanceoladas como especializacin a la caza de megafauna, y tras su extincin, Las Casitas se armara de arco y flecha de pequeas puntas resignadas a la caza menor. Si bien se poda desafiar la cronologa acadmicamente aceptada, persista la concepcin del paleo-americano exclusivamente carnvoro a la cola de los grandes animales. Posteriormente, recibira embates el modelo de cazadores especializados en megafauna como exponentes de ajustada adaptacin al pleistoceno tardo y holoceno temprano, especialmente de la irnicamente adaptacionista Nueva Arqueologa (el papel de la analoga etnogrfica, a travs de la "etnoarqueologa", en la erosin de la vieja concepcin no puede ser desdeado).
Un primer enfoque, el <em>tipolgico</em>, legitimaba y creaba dependencia del paradigma dominante Clovis, en cuanto las industrias sudamericanas eran concebibles morfolgicamente como derivadas de industrias norteamericanas. Un segundo enfoque, <em>cronolgico</em>, operando a travs de las asociaciones ltica/megafauna, desafiara el modelo Clovis de poblamiento rpido glacial pleistocnico, alejando las fechas para la lenta colonizacin del continente y permitiendo no slo el surgimiento americano y no paleosiberiano de la tecnologa cazadora, sino tambin la independencia tecnolgica de Amrica del sur con respecto al norte. Un tercer enfoque, <em>funcional</em>, podra permi-tir corroborar que no slo el poblamiento temprano no exiga cazadores ya especializados provenientes de Siberia o Norteamrica, sino que, con su perspectiva sistmica, arrojaba fuertes dudas acerca de semejante concepcin estrecha de las actividades de subsistencia de los primeros americanos como adictos a la carne de mastodonte, megaterio y gliptodonte.
En la regin de nuestro inters, ensayos tipolgicos para la economa de cazadores-recolectores conciernen a Falcn y a Las Mesas [Los Tres Cruces] en Lara. Las cronologas basadas en la asociacin de materiales lticos con megafauna en Taima-Taima, Muaco, Cucuruch (desde una perspectiva histrico cultural de Bryan, Cruxent y asociados), Las Mesas [Los Tres Cruces], y El Vano, siendo ste y Los Tres Cruces estudiados desde una perspectiva <em>ecolgico-sistmica </em>por Jaimes, que inicia los anlisis funcionales de reas, donde continuar Vierma.
El enfoque interpretativo del materialismo histrico de Sanoja y Vargas, modelo explcitamente intencionado como alternativa latinoamericana a las concepciones norteamericanas, propuso la formacin econmico-social de los cazadores-recolectores, reinterpretando los datos de Cruxent y asociados, y trabaj en el sitio superficial Monte Cano, Paraguan, por medio de Rodrguez y Morgantti, interesados tambin en establecer sectores espaciales ms all del anlisis y la comparacin tipolgicos. El materialismo histrico, como crtica de la economa poltica y uno de los constructos tericos cimeros de la "Modernidad", no es nada distante de una concepcin productivista y recursivista de un enfoque sistmico o ecolgico cultural, concibiendo el paisaje y la naturaleza como recurso a ser transformado (apropiado, producido o reproducido) por el hombre a travs de la tecnologa. Esta visin recursiva del espacio y la naturaleza caracteriza el estudio funcional (o funcionalista) por Jaimes de uso del espacio, es decir, la determinacin de reas de actividad, que mostrara estadsticamente que los sitios especializados, unifuncionales y visitados estacionalmente, dedicados a la cacera, matanza y destazamiento de las bestias pleistocnicas, eran minora frente a las reas contemporneas multifuncionales y ocupadas por perodos ms largos o semipermanentes. Tambin se mostraba la diversidad ecolgica y microambiental de las regiones ocupadas dentro de las tres grandes provincias bioclimticas del noroccidente de Venezuela, quiz an ms ricas en el pasado segn las evidencias paleoclimticas ms benignas, junto con una variada provisin de materias primas para la tecnologa. La concepcin de cazadores especializados ceda ante un modelo de cazadores-recolectores generalizados que estacionalmente aprovechaban la presencia de megafauna.
Jaimes (1996) plante para Lara tres conjuntos ("componentes" en 1999) arqueolgicos, capaces de sostener una secuencia evolutiva no exactamente tradicional, ya que la economa cazadora recolectora nunca era enfticamente especializada, sino oportunista, diversa y generalizada. El conjunto Los Tres Cruces, homlogo al Complejo Las Lagunas de Falcn, inclua puntas lanceoladas de hasta 30 cm, siendo el sitio (previamente llamado Las Mesas) un rea multifuncional de uso continuo, utilizada como cantera-taller. El conjunto Joboide, presenta puntas lanceoladas y folifceas, correspondientes a lo que se haba estimado como prototpicas para el cazador especializado, pero su presencia en Los Planes (de Giosne y de El Guayabo) corresponda a sitios multifuncionales de uso recurrente, y La Hundicin y El Vano, pese a presentar evidencias de caza de megafauna, tales como un megaterio con seales de destajamiento con una edad "mnima" de unos 10.710 aos, correspondan a sitios solamente semiespecializados. Los Planes de Giosne y La Hundicin tambin evidencia el conjunto Giosne, con puntas de cola de pescado de 3 a 10 cm dedicadas a la caza menor, tras la desaparicin de la megafauna. Los sitios de Paraguan, Siraba y Cayude, donde se presentan puntas cola de pescado, El Jobo y Clovis, por su cercana al mar y puntos de agua dulce, podan prescindir de estos animales, pues Jaimes plantea que el uso de madera y hueso, la recoleccin y la caza menor estuvieron presentes en todo momento en el noroccidente venezolano: la dedicacin a la caza mayor era estacional y estos cazadores recolectores no fueron dependientes de los grandes herbvoros para obtener protena, quiz practicando incluso la conservacin de alimentos <em>antes </em>de la extincin de estos, que tal vez abarata-ban los costos como complemento estacional en lugar de constituir el recurso principal. El bajo nmero de sitios especializados revela un "patrn de movilidad de logstica generalizada", siendo la especializacin meramente sectorial, local o incluso individual. Esto garantizaba la interdependencia entre los miembros de los grupos de cazadores-recolectores diversificados y aun lo que podramos llamar una "produccin de excedentes simblicos" previa a la produccin econmica material, que permita el ejercicio de la solidaridad del grupo desde su superestructura ideolgica. Esto eliminara la necesidad de la fisin grupal cada vez que la caza especializada era ecolgicamente insostenible debido a la presin demogrfica del aumento de consumidores frente al oligotrofismo. Esto permitira el aumento de conocimientos socio-ambientales de los grupos de cazadores-recolectores para una ptima adaptacin, una mayor circunscripcin territorial y la diversidad en la divisin del trabajo, y eventual y posiblemente, organizaciones sociales ms complejas.
Bibliografa
BRYAN, Alan L., Rodolfo M. CASAMIQUELA, Jos M. CRUXENT, Ruth GRUHN, y Claudio OCHSE-NIUS (1978): An El Jobo mastodon kill at Taima-Taima, Venezuela. Science >200 (4347): 1275-1277.
JAIMES QUERO, Arturo (1996): Visin crtica sobre la arqueologa de cazadores-recolectores en el Occidente de Venezuela: bases para una reinterpretacin. Boletn del Museo Arqueolgico de Qubor 5: 37-62.
----- (1999): Nuevas evidencias de cazadores-recolectores y aproxi-macin al entendimiento del uso del espacio geogrfico en el noroccidente de Venezuela: sus implicaciones en el contexto suramericano. <em>Arqueologa del rea Intermedia </em>1: 83-120.
SANOJA Obediente, Mario, y Alessandro MORGANTTI (1985): La formacin cazadora-recolectora del noroeste de Venezuela. Gens 2 (1): 5-22.
VIERMA, Lilia (199): Anlisis tipolgico, tecnolgico y espacial del sector V de Los Tres Cruces, Edo. Lara, Venezuela. <em>Boletn del Museo Arqueolgico de Qubor</em> 4: 31-62.
El esquema tipolgico era evolucionista mecnico y unilineal en fusin con el difusionismo caracterstico de la escuela normativa hegemnica en la arqueologa profesional de los Estados Unidos, dando primaca temporal y cultural a los paleo-indios norteamericanos, de cuyas puntas tipo Clovis podan derivarse todos los complejos tecnolgicos hallados al sur del Ro Grande, legitimando una situacin de dependencia incluso desde la prehistoria. Sin embargo, seran los continuadores de esta tradicin terica en Latinoamrica, y con notoriedad en Venezuela, quienes ofreceran los primeros intentos de contestar al paradigma Clovis, con evidencias de poblamiento ms temprano y de tradiciones tecnolgicas posiblemente independientes. En Venezuela, al esta-blecimiento de tipologas de artefactos lticos, resultante en la serie Joboide, sigui la bsqueda de asociaciones con megafauna que podan ser fechadas absolutamente. La sorpresa vino de la ltima comida herbal contenida en el estmago de un joven mastodonte en cuya cavidad plvica se hall un fragmento de punta Joboide: la caza de grandes herbvoros en Taima-Taima arroj la edad de 14.000 aos, bastante anterior a los 11.500 aos de Clovis, que admita las puntas cola de pescado sudamericanas de 9.000 aos. Con mucha resistencia del Establishment, era acumulada la evidencia parcial de un poblamiento interglaciar, o al menos anterior al pleistoceno tardo del modelo Clovis. Eran dudosos los 16.000 aos de Muaco. Pero los yacimientos paleoindios venezolanos, incluyendo Cucuruch en Falcn y Manzanillo en Zulia, no seran los ms antiguos: Pedra Furada, en Brasil, arrojara unos bastante desconfiados 40.000 aos de antigedad. Cruxent y Rouse propusieron una secuencia evolutiva para la serie Joboide que se iniciaba con un "estadio pre-puntas de proyectil", al menos de pre-puntas lticas, puesto que suponan la existencia de una suerte de "manufactura osteodontoquertica" para las ausentes puntas del Complejo Camare, cuya piedra presentaba choppers. En Las Lagunas se incluan puntas lanceloadas. En el Complejo El Jobo aparecan las puntas foliceas y lanceoladas como especializacin a la caza de megafauna, y tras su extincin, Las Casitas se armara de arco y flecha de pequeas puntas resignadas a la caza menor. Si bien se poda desafiar la cronologa acadmicamente aceptada, persista la concepcin del paleo-americano exclusivamente carnvoro a la cola de los grandes animales. Posteriormente, recibira embates el modelo de cazadores especializados en megafauna como exponentes de ajustada adaptacin al pleistoceno tardo y holoceno temprano, especialmente de la irnicamente adaptacionista Nueva Arqueologa (el papel de la analoga etnogrfica, a travs de la "etnoarqueologa", en la erosin de la vieja concepcin no puede ser desdeado).
Un primer enfoque, el <em>tipolgico</em>, legitimaba y creaba dependencia del paradigma dominante Clovis, en cuanto las industrias sudamericanas eran concebibles morfolgicamente como derivadas de industrias norteamericanas. Un segundo enfoque, <em>cronolgico</em>, operando a travs de las asociaciones ltica/megafauna, desafiara el modelo Clovis de poblamiento rpido glacial pleistocnico, alejando las fechas para la lenta colonizacin del continente y permitiendo no slo el surgimiento americano y no paleosiberiano de la tecnologa cazadora, sino tambin la independencia tecnolgica de Amrica del sur con respecto al norte. Un tercer enfoque, <em>funcional</em>, podra permi-tir corroborar que no slo el poblamiento temprano no exiga cazadores ya especializados provenientes de Siberia o Norteamrica, sino que, con su perspectiva sistmica, arrojaba fuertes dudas acerca de semejante concepcin estrecha de las actividades de subsistencia de los primeros americanos como adictos a la carne de mastodonte, megaterio y gliptodonte.
En la regin de nuestro inters, ensayos tipolgicos para la economa de cazadores-recolectores conciernen a Falcn y a Las Mesas [Los Tres Cruces] en Lara. Las cronologas basadas en la asociacin de materiales lticos con megafauna en Taima-Taima, Muaco, Cucuruch (desde una perspectiva histrico cultural de Bryan, Cruxent y asociados), Las Mesas [Los Tres Cruces], y El Vano, siendo ste y Los Tres Cruces estudiados desde una perspectiva <em>ecolgico-sistmica </em>por Jaimes, que inicia los anlisis funcionales de reas, donde continuar Vierma.
El enfoque interpretativo del materialismo histrico de Sanoja y Vargas, modelo explcitamente intencionado como alternativa latinoamericana a las concepciones norteamericanas, propuso la formacin econmico-social de los cazadores-recolectores, reinterpretando los datos de Cruxent y asociados, y trabaj en el sitio superficial Monte Cano, Paraguan, por medio de Rodrguez y Morgantti, interesados tambin en establecer sectores espaciales ms all del anlisis y la comparacin tipolgicos. El materialismo histrico, como crtica de la economa poltica y uno de los constructos tericos cimeros de la "Modernidad", no es nada distante de una concepcin productivista y recursivista de un enfoque sistmico o ecolgico cultural, concibiendo el paisaje y la naturaleza como recurso a ser transformado (apropiado, producido o reproducido) por el hombre a travs de la tecnologa. Esta visin recursiva del espacio y la naturaleza caracteriza el estudio funcional (o funcionalista) por Jaimes de uso del espacio, es decir, la determinacin de reas de actividad, que mostrara estadsticamente que los sitios especializados, unifuncionales y visitados estacionalmente, dedicados a la cacera, matanza y destazamiento de las bestias pleistocnicas, eran minora frente a las reas contemporneas multifuncionales y ocupadas por perodos ms largos o semipermanentes. Tambin se mostraba la diversidad ecolgica y microambiental de las regiones ocupadas dentro de las tres grandes provincias bioclimticas del noroccidente de Venezuela, quiz an ms ricas en el pasado segn las evidencias paleoclimticas ms benignas, junto con una variada provisin de materias primas para la tecnologa. La concepcin de cazadores especializados ceda ante un modelo de cazadores-recolectores generalizados que estacionalmente aprovechaban la presencia de megafauna.
Jaimes (1996) plante para Lara tres conjuntos ("componentes" en 1999) arqueolgicos, capaces de sostener una secuencia evolutiva no exactamente tradicional, ya que la economa cazadora recolectora nunca era enfticamente especializada, sino oportunista, diversa y generalizada. El conjunto Los Tres Cruces, homlogo al Complejo Las Lagunas de Falcn, inclua puntas lanceoladas de hasta 30 cm, siendo el sitio (previamente llamado Las Mesas) un rea multifuncional de uso continuo, utilizada como cantera-taller. El conjunto Joboide, presenta puntas lanceoladas y folifceas, correspondientes a lo que se haba estimado como prototpicas para el cazador especializado, pero su presencia en Los Planes (de Giosne y de El Guayabo) corresponda a sitios multifuncionales de uso recurrente, y La Hundicin y El Vano, pese a presentar evidencias de caza de megafauna, tales como un megaterio con seales de destajamiento con una edad "mnima" de unos 10.710 aos, correspondan a sitios solamente semiespecializados. Los Planes de Giosne y La Hundicin tambin evidencia el conjunto Giosne, con puntas de cola de pescado de 3 a 10 cm dedicadas a la caza menor, tras la desaparicin de la megafauna. Los sitios de Paraguan, Siraba y Cayude, donde se presentan puntas cola de pescado, El Jobo y Clovis, por su cercana al mar y puntos de agua dulce, podan prescindir de estos animales, pues Jaimes plantea que el uso de madera y hueso, la recoleccin y la caza menor estuvieron presentes en todo momento en el noroccidente venezolano: la dedicacin a la caza mayor era estacional y estos cazadores recolectores no fueron dependientes de los grandes herbvoros para obtener protena, quiz practicando incluso la conservacin de alimentos <em>antes </em>de la extincin de estos, que tal vez abarata-ban los costos como complemento estacional en lugar de constituir el recurso principal. El bajo nmero de sitios especializados revela un "patrn de movilidad de logstica generalizada", siendo la especializacin meramente sectorial, local o incluso individual. Esto garantizaba la interdependencia entre los miembros de los grupos de cazadores-recolectores diversificados y aun lo que podramos llamar una "produccin de excedentes simblicos" previa a la produccin econmica material, que permita el ejercicio de la solidaridad del grupo desde su superestructura ideolgica. Esto eliminara la necesidad de la fisin grupal cada vez que la caza especializada era ecolgicamente insostenible debido a la presin demogrfica del aumento de consumidores frente al oligotrofismo. Esto permitira el aumento de conocimientos socio-ambientales de los grupos de cazadores-recolectores para una ptima adaptacin, una mayor circunscripcin territorial y la diversidad en la divisin del trabajo, y eventual y posiblemente, organizaciones sociales ms complejas.
Bibliografa
BRYAN, Alan L., Rodolfo M. CASAMIQUELA, Jos M. CRUXENT, Ruth GRUHN, y Claudio OCHSE-NIUS (1978): An El Jobo mastodon kill at Taima-Taima, Venezuela. Science >200 (4347): 1275-1277.
JAIMES QUERO, Arturo (1996): Visin crtica sobre la arqueologa de cazadores-recolectores en el Occidente de Venezuela: bases para una reinterpretacin. Boletn del Museo Arqueolgico de Qubor 5: 37-62.
----- (1999): Nuevas evidencias de cazadores-recolectores y aproxi-macin al entendimiento del uso del espacio geogrfico en el noroccidente de Venezuela: sus implicaciones en el contexto suramericano. <em>Arqueologa del rea Intermedia </em>1: 83-120.
SANOJA Obediente, Mario, y Alessandro MORGANTTI (1985): La formacin cazadora-recolectora del noroeste de Venezuela. Gens 2 (1): 5-22.
VIERMA, Lilia (199): Anlisis tipolgico, tecnolgico y espacial del sector V de Los Tres Cruces, Edo. Lara, Venezuela. <em>Boletn del Museo Arqueolgico de Qubor</em> 4: 31-62.
sally:
que abueno saber un poquito mas de la historia venezolana!!!!!
